Lo que surgió como un proyecto editorial pionero en la provincia, impulsado desde UEPC, propone desde hace dos décadas la reflexión pedagógica y la discusión política educativa desde la perspectiva de las y los trabajadores e impulsa un reconocimiento a la práctica docente cotidiana. En suma, diversas manifestaciones de la crítica y el debate como formas de defender el derecho social a la educación.
Evocar el 2001 en Argentina puede ser a la vez un ejercicio de memoria de la devastación -el agravamiento de la crisis social, política, económica y cultural del modelo neoliberal en el país-, al tiempo que una labor de recuperación de innumerables prácticas de resistencia y creatividad política, desde las cuales se enfrentaba el supuesto “fin de la historia”. Como otras organizaciones gremiales, UEPC desafió el avasallamiento de los derechos de las y los trabajadores con movilizaciones, huelgas y jornadas de protesta, pero también con iniciativas destinadas a trascender esa situación. En lo más profundo de la debacle dio lugar a dos proyectos paridos casi por los mismos imperativos, que aún hoy se mantienen hermanados: el Instituto de Capacitación e Investigación (ICIEC) -cuya creación y evolución reseñamos en nuestra anterior edición- y la revista educar en Córdoba, que en octubre cumplió 20 años de vida.
Quienes impulsaron la publicación subrayan el contexto de surgimiento. En primer término, un avance de los proyectos privatizadores que amenazaban el ámbito de la educación en Argentina, pues ya se habían impuesto sobre los principales servicios públicos y el sistema de jubilaciones y pensiones, entre otros campos. Otro aspecto que destacan está vinculado a la voluntad de las élites dominantes de circunscribir a las y los trabajadores a la discusión de cuestiones laborales y salariales. “Para el neoliberalismo, las y los maestros no podíamos hablar de educación o de pedagogía, que es la esencia de nuestro trabajo. Todo era diseñado por un grupo de expertos de los organismos internacionales; nosotros solamente podíamos hablar de salarios. Había que romper esa limitación, y allí se inscriben la generación del ICIEC y de la revista”, explica Aurorita Cavallero, actual secretaria de Educación del gremio, quien se incorporó a participar en la publicación poco después de su surgimiento. Vinculado a este punto, se presentaba la necesidad de las y los docentes de poder expresar una palabra legítima en los debates sobre las políticas educativas. “Todos hablaban y opinaban de educación, menos quienes trabajábamos en ese ámbito: un dirigente agropecuario, un abogado, un médico, pero ninguna maestra o maestro. Ni siquiera nos llamaban”, recuerda Carmen Nebreda, ex secretaria general de UEPC y una de las principales impulsoras -junto a Walter Grahovac, por entonces titular del sindicato- de la iniciativa de la revista. “En ese marco, decidimos avanzar con el ICIEC y la educar. Fue una manera de decir: “Bueno, si nos están disparando por todos lados, salgamos por arriba”, grafica, entre risas, Oscar Ruibal, otro de los dirigentes que empujaron la publicación.
Una palabra innovadora en Córdoba
Para la revista se convocó a la periodista Liliana Arraya, quien contaba con experiencia de trabajo en vinculación con organizaciones gremiales. “Por esos años, empezamos a entender que era necesario profesionalizar algunas tareas dentro del sindicato. La edición de la revista fue una de ellas”, puntualiza Ruibal. En esa línea, se conformó un equipo de profesionales, que se abocaron a las labores de producción periodística, arte, diseño y fotografía. A lo largo de los primeros 10 años de la educar trabajaron Micaela Bressán, Eugenia Monti, Alexis Oliva, Mario Mercuri, Florencia Pérez Gaudio, Natalia Riva, Silvana Zanelli, Mariana Mandacovick, Mónica Beltrán -como corresponsal en Buenos Aires- y Milena Pasetti en la producción de artículos y entrevistas, entre otras y otros, siempre bajo la dirección periodística de Liliana Arraya. Se convocó además a Bibiana Fulchieri y Carlos Luna en fotografía y al artista Lucas Di Pasquale en arte y diseño. Desde ese entonces y hasta actualidad, cada una de las 39 ediciones de la revista estuvo bajo la corrección de Lizabeth Kent, encargada también de la impresión.
La publicación comenzó a funcionar con el asesoramiento de un Consejo Editorial, formado por autoridades de UEPC, entre quienes estuvo desde un principio Carmen Nebreda y luego se fueron sumando Oscar Ruibal y Aurorita Cavallero. También fue importante la presencia, en un primer momento, de Walter Grahovac, quien era el Secretario General del sindicato. Poco después, ese consejo fue ampliando su conformación con referentes del campo de la educación, guiado por un criterio de pluralidad de miradas. Así se sumaron Encarnación Sobrino, Delia Provinciali y Alicia Carranza. Este espacio era importante dentro de la dinámica de la publicación, pues de allí surgían los temas que se abordaban. “Se proponían los debates y nos poníamos de acuerdo de qué manera tratarlos y con quiénes. En general, en cada número había un eje central que vertebraba toda la edición”, recuerda Arraya. “Estábamos muy arriba de la revista, buscábamos que realmente expresara lo que el gremio quería decir, que no congregara solo debates académicos, sino que estuviera presente el trabajo docente”, comenta Nebreda.
A lo largo de los 20 años de vida, las principales discusiones educativas e importantes referentes intelectuales del país, dentro de ese campo disciplinar y otros afines, han estado presentes en la revista. Durante la primera década, cada edición -a razón de dos a tres por año, de 40 páginas cada una- desmenuzaba un tema a través de artículos breves y entrevistas, al tiempo que se difundían también investigaciones académicas, experiencias innovadoras desarrolladas en toda la provincia, novedades editoriales, lecturas recomendadas, entre las secciones fijas. “Tratábamos de llevar cosas al aula que pudieran ser usadas por los docentes, de ofrecerles insumos”, puntualiza Arraya. La publicación combinaba un abordaje periodístico de debates y experiencias pedagógicas, desde perspectivas variadas, con una ágil propuesta de lectura. Educar en Córdoba se constituyó así en la primera revista pedagógica en la provincia que ha mantenido una circulación regular por 20 años. A partir de su aparición surgieron otras desde ámbitos académicos u oficiales, pero el proyecto señero fue iniciativa de un gremio interesado en la “defensa de la educación y los educadores”, como propone UEPC.
Desde su primera edición, la revista sostuvo una concepción que se mantuvo hasta la actualidad: lo laboral y lo pedagógico como dos caras de la misma moneda. “Nuestra propia concepción de la militancia gremial nos llevó a querer reflexionar sobre lo que hacemos, evaluar lo que producimos y en base a eso tomar decisiones”, explica Oscar Ruibal. Esta perspectiva de trabajo explica no solo el surgimiento de la educar como un espacio de expresión con respecto a debates del ámbito educativo, sino también del ICIEC como un lugar de formación e investigación con una perspectiva propia. Como sintetiza Gonzalo Gutierrez, actual director de ambos proyectos, “lo que tienen en común desde su origen el Instituto y la revista es el intento de construir en el espacio público una voz pedagógica de la UEPC”.
Otro objetivo para el cual la publicación ha sido estratégica, es ser un espacio desde el cual UEPC pudiera intervenir en los debates académicos y sociales sobre políticas educativas, a partir de referentes propios u otros convocados para temas específicos. “Teníamos que expresar nuestras propias posiciones como gremio. En la actualidad, si se discute sobre educación y las y los maestros hacemos un planteo, parece algo normal, pero 20 años atrás eso no era así, fuimos el primer gremio del país en hacerlo”, comenta Carmen Nebreda. En una perspectiva similar, Juan Monserrat, actual secretario general del sindicato, plantea que “el valor que tienen -tanto la revista como otras publicaciones que hacemos- es que van generando agendas de temáticas que nos van preocupando. Y nuestro público, además de ser las y los docentes, también es la sociedad cordobesa. La educación pública es un bien muy preciado, por lo tanto participar del debate político pedagógico es necesario. Y lo hacemos desde nuestra perspectiva: el ICIEC y la revista educar expresan las preocupaciones de las y los docentes como educadoras y educadores”.
Cambios editoriales, la misma vocación
A partir de 2010 -con la asunción de Juan Monserrat al frente de UEPC- la revista emprende una serie de transformaciones, que no modifican sus objetivos político editoriales, aunque sí la forma de plasmarlos en un producto y, por ello también, en el equipo de trabajo. Esta nueva etapa comenzó ese año, a través de una renovación en el Consejo Editorial y la asunción de Gustavo Varela como director periodístico de la revista. Y se consolidó fundamentalmente en 2012, cuando Gonzalo Gutiérrez asume la dirección editorial, hasta la actualidad. Más allá de las improntas personales, esta etapa coincidió con un fuerte crecimiento del gremio -lo que obligó a modificar la modalidad de producción de la revista- y un mayor desarrollo del trabajo pedagógico del sindicato, a cargo del ICIEC.
Se suceden, entonces, una serie de cambios en el staff de producción, integrado en distintos momentos por: Ariel Orazzi, Gino Maffini, Leandro Groshaus, Pablo Carrizo, Carina Masciángelo, Ivana Viano, Mercedes Arrieta, Juan Pablo Ravasi, Eugenia Rotondi y Luciana Corigliano. Un aporte relevante fue también la incorporación de Santiago Martínez Luque como coordinador de producción, quien permitió introducir debates trascendentes para algunos cambios de la revista. Otras facetas en que se dieron transformaciones importantes fueron el diseño y el arte de la publicación: se relanzó su estética en 2010, a cargo de Agustín Massanet; y en 2012 se consolidará su impronta actual, a partir de la propuesta de Zetas – Comunicación y Diseño Gráfico, y de la incorporación de las ilustraciones editoriales del artista Hernán Cappelletti (Cape), que pasarán a ser un componente distintivo de la revista y, en muchos casos, de la propia UEPC.
En términos de las características del producto, los cambios fueron importantes en esta nueva etapa: se plasmó la decisión de incorporar un texto editorial desde el gremio; la elaboración de un dossier específico para abordar el tema central, luego se presentan artículos y entrevistas de intelectuales invitados; las experiencias pedagógicas comenzaron a tener mayor extensión y profundidad; se creó la sección Construyendo soluciones, enfocada en visibilizar saberes producidos por las y los docentes en forma colectiva; se incrementó la presencia de docentes de toda la provincia y de dirigentes de las delegaciones de UEPC, a través de columnas de opinión. Todo ello derivó en un mayor volumen de contenidos -con ediciones de hasta 82 páginas- y en un producto de artículos más extensos y con abordajes pedagógicos más detallados.
educar en Córdoba | no 39 | diciembre 2021 | Año XX | ISSN 2346-9439